esperanza de un tiempo mejor
Ellos, los Reyes magos, no existen.
o tambiéncelebracion orgiastica de la doble moral
No sólo los reyes magos no existen (me refiero a esos tipos vestidos con túnicas de baratillo y coronas todo a cien) sino que como fenómeno son una invencion perversa.
El único evangelio (1) que habla del tema es el de San Mateo. "unos magos vinieron del oriente"-dice. Ni Reyes ni en número tres. Me temo que se suponen tres porque "le ofrecieron presentes de oro, incienso y mirra" y para acabar de suponer mucho, asignamos que tocaban a uno por regalo.
Así que los convertimos en reyes, supongo que para prestigiarlos, ya que hasta no hace mucho los monarcas (e incluso dictadores) lo eran por la gracia de Dios (amén de usar sangre azul).
Más de uno me saldrá con eso de la tradición. Ok. Cero problemas. Puedo asumir que los reyes magos se pueden convertir de invención a tradición, en beneficio de inculcar unos valores determinados. Yo les diré qué valores veo:
1. El contínuo chantaje al que se ven sometidos los niños durante casi un mes si-no-te-por-tas-bien-los-re-yes-te-trae-rán-car-bón. Más adiestramiento que educación: si bueno-premio, si malo-castigo.
2. Inyección de consumismo feroz. Papa Noel: regalos. Reyes magos: regalos. No regalo. Regalos. Entiendo que los niños deben tener regalos e incluso juguetes, pero estamos a una generación vista de, precisamente por eso, tener la necesidad de concertar un dia para alegrar a los pequeños. Pero para los que vivimos en el primer mundo la opulencia es la tónica general. Padres, abuelos, tíos, padrinos... nada de ponerse de acuerdo y regalar algo entre todos. No. Cada uno un regalo diferente. La parada de los monstruos de plástico-duro cada 6 de Enero. Veo mucha gente necesitada: unos de comida, otros de cariño y otros de conciencia. Perdonenme pero siento mucha vergüenza.
3. Comprar el título de padre. "Uno no es un padre por tener un hijo de igual manera que uno no es pianista por tener un piano". Qué gran verdad. Veo por todos lados niños desatendidos por papás y mamás que no entienden que la gran carencia de los pequeños es el tiempo de sus progenitores, que esa carencia es reclamada amargamente, y que definitivamente muy barata tiene que ser la conciencia a la que queremos vendar los ojos con un regalo.
4, 5, ...
Podemos girar la cabeza o hacer algo. Podemos educar a nuestro hijos. Podemos ejercer de padres e imponer otros límites. Podemos actuar en nuestra propia casa, por el bien de ellos, por nuestro bien. Somos la generación que abandonará a sus antecedentes para ser abandonados por sus descendientes. Si no lo evitamos, claro.
Disculpen el tono. Agradeceré cualquier rectificación que me convenza de estar equivocado, nada me gustaría más; pero si esta noche entran tres tipos en casa les recibiré con un cuchillo como el del payaso asesino (http://ellosnoexisten.blogia.com/upload/clown.jpg)
(1) Sagrada Biblia, Barcelona, 1977, Editorial Herder.
5 comentarios
Mª Ángeles -
Navegando por internet, he encontrado esta página y me ha parecido bastante interesante.
Me ha gustado mucho tu comentario sobre los Reyes Magos y estoy totalmente de acuerdo contigo.
La primera gran desilusión de mi vida fue al enterarme que los Reyes Magos no existían. Recuerdo que lloré amargamente.
Tengo una hija de 17 años. Cuando era una niña siempre me sentía culpable al acercarse el 6 de enero. No me gustaba engañarla. Lo hacía porque me sentía presionada por familiares y amigos, pero me acordaba de mí misma cuando me enteré de la verdad.
Siempre me he preguntado para qué crear una ilusión (mejor dicho: un engaño) si luego viene la desilusión. No es justo.
Pienso que a los niños se les puede hacer felices igualmente, sin tener que mentirles, eso genera desconfianza hacia los padres.
No me gustan los Reyes Magos; es una gran mentira y las mentiras tienen las patas muy cortas.
jesús -
Golfo -
¿está bien así?
jesús -
Gracias por los cumplidos. En cuanto a los críos me atengo a no crearles falsas espectativas, a ejercer el "no mentirás", a darles ilusiones que puedan ser cumplidas, etc. De todas formas no se preocupe Ud. que ya se encargarán políticos y comerciantes (a los que jesús echó del templo) de continuar la tradición.
Es importante soñar, Estela, hace ud. bien, no volverá a tener esos 26 nunca más e incluso lo que pueda hacer más adelante no valdrá igual que con su juventud. Apelo a su obligación de merendarse la vida.
Ni "ellos no existen" ni "Cien años de perdón" están a la venta, aunque están disponibles para masoquistas varios (sólo tienen que pedirlo amablemente). En cuanto a "Las piedras grandes de Adam X", la estoy construyendo on line.
Mande esa foto y veremos, quizás de albañil no es tan mala idea. Mande mejor un repertorio de fotos, no hace falta que todas sean desnudos.
estela -