fuego de pecho

disfruten.

La cena de Nochevieja ha consistido en huevos fritos con patatas.

Los huevos son de las dos gallinas que Itziar hospeda, alimenta con trigo y maiz, y deja pasear a diario en su casa. Fueron fritos con aceite de oliva virgen extra de primera prensada en frío. Con ajo y pimentón picante. Las patatas del Señor Cura, con corte "cigarrillo" se dejaron reposar previamente en agua salada. Media docena de olivas negras pusieron el punto extraordinario de sofisticación. Los panecillos individuales, de espelta integral biológica y levadura natural, salieron del horno media hora antes.

El vino, un C.V.N.E. de 2002, una apuesta tan segura como modesta 

De postre una naranja navelina primera. 

7 comentarios

[luces - 07 de enero de 2006 - 18:47]

vaya, qué concepto tan pobre y que cariño tan tibio
:(

[jesús - 07 de enero de 2006 - 16:42]

admito que puedo estar equivocado :)

[luces - 07 de enero de 2006 - 11:32]

tu crees?
(joder...qué imagen más rara debo estar dando para que un amigo piense esas cosas).

[jesús - 07 de enero de 2006 - 01:40]

luces, me temo que te gustaría estar dentro del "pilder", a los controles.
:)

[luces - 06 de enero de 2006 - 10:42]

gauuuuuuu me encanta el dibujo.

[jesús - 02 de enero de 2006 - 20:12]

Oh, a Ud. le reservo un sandwich con Minerva X y Afrodita A.

[Golfo - 02 de enero de 2006 - 17:20]

Y 12 uvotas ¿no?
Yo, en verdad, de postre, quiero un postre como del tio de la foto.